Momentos Hay momentos en los que decidimos hundir todas nuestras naves, aún sabiendo que, más tarde o más temprano, tendremos que volver nadando. Comparte esto: Haz clic para compartir en Facebook (Se abre en una ventana nueva) Facebook Haz clic para compartir en X (Se abre en una ventana nueva) X Haz clic para enviar un enlace por correo electrónico a un amigo (Se abre en una ventana nueva) Correo electrónico Me gusta Cargando... Relacionado
¡Tocado y hundido! Arriesgar tiene estas cosas